Las propiedades físicas y químicas del agua y la implementación de la terapia acuática han hecho posible la gran relevancia que ha tenido su uso como agente terapéutico. Valorada a lo largo de los siglos de muy diferente manera, ha demostrado ser unos de los tratamientos de mayor eficacia para multitud de patologías, sobre todo en el ámbito de la Rehabilitación. Es un procedimiento terapéutico en el cual se utilizan, de forma combinada, las propiedades mecánicas del, agua junto con técnicas e intervenciones específicas de tratamiento, con el fin de facilitar la función y la consecución de los objetivos terapéuticos propuestos.
La utilización del medio acuático como herramienta terapéutica expone al cuerpo a una serie de procesos que tienen un resultado positivo en el paciente.
La aplicación de las técnicas distintas hidroterapias (Halliwick, Bad-Ragaz, Watsu) permite abarcar a distintas edades de la población y con ello facilitar la recuperación del paciente.
No se debe entender la terapia acuática como un sustituto de la fisioterapia sino como un abordaje terapéutico y lúdico complementario al proceso de rehabilitación del paciente con trastornos funcionales o sensitivo-motores; las sesiones en el agua exigen del paciente una búsqueda constante de equilibrio, simetría corporal, control motor y coordinación muscular y proporcionan mayor estimulación táctil y sensorial.
Existe evidencia científica de que la terapia acuática es una herramienta eficiente en la recuperación de habilidades motoras en pacientes neurológicos y por tanto nuestro centro ofrece sesiones totalmente individuales y colectivas dirigidas por un terapeuta formado en diferentes técnicas de terapia acuática y en rehabilitación acuática.
CEDANE ofrece esta terapia con evidencia científica en sus resultados, en los niños y/o en los adultos, trabajando de una forma individualizada y específica a las necesidades de cada uno de sus participantes.
